Hechos 20:28 Por tanto, mirad~~ por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por pastores, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre.
En las aerolíneas, antes de cada vuelo, las azafatas demuestran cómo usar la máscara de oxígeno en caso de emergencia. Cada vez instruyen a los pasajeros que viajan con niños pequeños que se pongan ellos primero las máscaras y después a sus niños. Si no, ambos podrían morir por una repentina descompresión y pérdida de oxígeno.
Antes de navegar a Jerusalén, Pablo instruyó a los ancianos de Efeso que “estén continuamente mirando por ustedes – y por el rebaño”. Si ellos no aprendían a cuidar sus pensamientos privados y compromisos, no serían capaces de cuidar de los creyentes en la iglesia.
La orden “estén continuamente mirando por vosotros” significa “cuidar, estar alerta o preocuparse por”, y está dirigida a los líderes del ministerio. Pablo luego agrega: “todo el rebaño”. ¿Cómo debían hacer esto los ancianos?
Una de las áreas era la enseñanza de la palabra de Dios. Pablo advierte, “Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren” (1 Ti 4:16). Si ellos iban a ser “buenos ministros de Jesucristo”, debían nutrirse [personalmente] con las palabras de la fe y de la “buena doctrina que has seguido” (4:6).
Antes de ser eficaces en ministrar a otros, debían conocer y practicar los mandamientos y principios de las Escrituras. Otra de las áreas era la batalla con su orgullo personal: “Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos” (Mt 6:1).
El pastor y los líderes de la iglesia deben dar ejemplo de rendirse cuentas mutuamente y deben estar preparados para hacer y para que se les haga preguntas difíciles, sin temor. ¿Qué te está enseñando Dios en Su Palabra hoy? ¿Con qué pecado estás luchando? ¿Qué estás pidiendo en oración? Si no eres responsable ante alguien, es difícil crecer en tu caminar con Cristo, y es fácil que te enfríes, te vuelvas superficial y estés a la defensiva.
“Señor, Tu iglesia junta está luchando con el pecado y la oposición. Debemos cuidarnos los unos a los otros. Danos Tu amor para Tu iglesia hoy.”