2 Timoteo 4:5. “Pero tú sé sobrio~~ en todo, soporta las aflicciones,*~ haz obra de evangelista*~, cumple tu ministerio*~.”
Es impresionante lo fácil que es convencer a la gente de falsas opiniones y de errores basados en emociones. Pablo advirtió a Timoteo (1 Tim 4:3) que “vendrá tiempo cuando no tolerarán la sana doctrina”, o “sanas enseñanzas” (Gr, raíz de la palabra “higiene”).
Las enseñanzas Escriturales pueden parecer pasadas de moda, o estar fuera de tiempo, y por eso la gente escogerá maestros “conforme a sus propias concupiscencias” (deseo de experiencias emocionales o sentimentales), porque tienen “comezón de oír” (querer sentirse bien o incrementar su imagen propia) (4:3). Pablo da cuatro imperativos como respuesta a esto:
Primero, ordena a Timoteo (y a nosotros) a ser “sobrio” (libre de tóxicos) o “sobrio de mente, atento”, bien equilibrado y en control de sus pensamientos y acciones. En medio de un mundo lleno de contradicciones, fábulas y persecución, los cristianos debemos estar calmados y equilibrados “en todo”, evitando las modas y el sensacionalismo.
Segundo, Timoteo debía “soportar las aflicciones” (sufrir desgracias, maldad o aflicción). Cualquier persona o ministerio basado en la Biblia inevitablemente será perseguido. Parte de ser “auto controlado” es saber que las dificultades vendrán y decidir previamente reaccionar adecuadamente: “lo soportaré sin quejarme, sin rezongar o reaccionar mal como lo hizo Israel” (1 Co 10:9-11).
No hay mayor privilegio que sufrir a causa de Su Nombre (Hechos 5:41). ¿Es ese tu deseo?
Tercero, Timoteo debía “urgentemente hacer obra de evangelista”. No lo llama “evangelista”, pero le ordena hacer el trabajo de un evangelista, tal como a cualquier otro miembro de la iglesia. Debemos ayudar a los no creyentes a darse cuenta de su pecaminosidad y a mostrarles cómo solamente Cristo Jesús puede resolver su problema de pecado.
Cuarto, Timoteo debía “decidirse a cumplir su ministerio”. “Cumplir” significa “completar o cumplir en su totalidad”. La pasión de Pablo está resumida en Hch 20:24: “ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús.” Que Dios te dé el compromiso para cumplir Su propósito para tu vida (Ef 2:10).
“Sé que el camino que Tú has escogido para mí no es fácil y que está lleno de riesgos; por favor mantén ardiendo mi corazón por las almas de los hombres, para verlos comenzar a confiar en Ti.”